27.6.08

VERBENA

2 comentarios:

Cronopio dijo...

UF, la verbena siempre la asocié al fuego, y cómo no, a la magia potagia, esa que practicábamos de pequeños... luego llegaron las “fiestecitas” de la adolescencia y juventud, en las que contemplar el nuevo amanecer desde la playa era lo mejor después de lo de Galileo. Porque, con Tabucchi, siempre pensé que las mejores elecciones son las viscerales, ahora, viejo y ruinoso, la noche más corta del año me escondo como un vulgar ladrón y renuncio al incendio de la noche en un alarde de señorial cobardía digno de Oscar Wilde

Anónimo dijo...

Espero que lo de "viejo y ruinoso" no sea más que un poco de "captatio benevolentia" (je, je, je). Yo no te veo nada decrépito, la verdad, amigo Cronopio. Creo que la posible melancolía temerosa de las verbenas y los solsticios, a cualquier edad, antes y ahora, se debe conjurar con muchas risas, muchos bailes y fuegos y sobre todo con muchos y buenos amigos...
¡Besos!