29.11.05

EL VUELO DEL GANSO


"Sopa de Ganso", Hermanos Marx


Web de fotografía "El nido del ganso"

"Ma mère l'oie", Claude Debussy


"...wild geese that fly
with the moon on their wings
these are a few of my favourite things"
De la canción "My favourite things", Rogers & Hammerstein

"La niña de los gansos", Hermanos Grimm

16.11.05

RAPTURE


With photographs
And magnetic tape
We capture
Pretty animals in cages
Pretty flowers in vases
Enraptured

And doesn't the tree
Write great poetry?
Doing itself so well

Do you blame Monet?
His gardens in Giverny
He captured
And lovely Basho
His plunking ponds and toads
Enraptured

The fate of Kurt Cobain
Junk coursing through his veins
And young Virginia Woolf
Death came and hung her coat

Love of color, sound and words
Is it a blessing or a curse?
Enraptured


"Rapture", en Carbon Glacier, Laura Veirs, Nonesuch, 2004.

14.11.05

FRANÇOISE

El concierto de Françoise Breut no fue "magnífico" por culpa de algunos elementos ajenos a la cantante. En primer lugar, se hizo esperar muchísimo, detrás de dos actuaciones interminables de grupos barceloneses jóvenes y quizá prometedores, pero con un presente algo verde todavía. El local seguramente es estupendo como "laboratorio musical" para esas nuevas propuestas, pero desde luego no da la talla como sala de conciertos profesional (sin ventilación, sin guardarropía, sin lugar donde sentarse, muy alejado del centro... ¡Green Ufos, volved al Apolo!)
Sin embargo salió la francesita, menuda, con su aire aniñado y su voz intensa y melancólica y un montón de vinilos curiosos que iba poniendo, y se nos olvidó todo, y volvió a cautivar con su música triste y sus preciosas, estremecedoras canciones. No puedo evitar que me sigan gustando más las del disco anterior, Vingt à trente mille jours, quizá porque las he oído mucho más ("Si tu disais on y va...") Pero el nuevo disco, Une saison volée, también es muy bueno. Las colaboraciones de Herman Düne, Fabio Viscogliosi, Jérome Minière, Joey Burns de Calexico y, (¡cómo no!) Dominique A son todo un lujo...

Concierto de Françoise Breut + Muzak + Silice, "Sons de Tardor", Les Basses, sábado 12 de noviembre a las 22 h.

9.11.05

BAC 05


Ayer, inauguración de la exposición "Code V" dentro del BAC 05 en el CCCB. Esta vez el tema era la violencia ("¿es la violencia la nueva forma de comunicación del siglo XXI?"). Mucha, muchísima gente, muy joven y muy moderna, visitando la exposición. La aglomeración era tal que resultaba imposible ver los vídeos. Igual vuelvo otro día para ver al menos el de Bill Viola y algún otro, aunque confieso que el de Orlan me da una grima horrorosa. Entre los artistas, aparte de la consabida y cargante dosis de sangre y vísceras, algunas cosas me interesaron especialmente, por ejemplo, la serie fotográfica de la holandesa Nienke Klunder ("Secuencia 5") donde se representa fotograma a fotograma una metamorfosis llena de violencia y erotismo. Menos espectaculares que otras instalaciones, las obras de Hugo James ("La guerra de las especies"), por ejemplo, también resultaban extrañamente atractivas por la mezcla de lo animal y lo manufacturado y sus alusiones a la mitología clásica (Marsias, el Ouroboro...) E insólitas, por lo pertinentes (véase lo que está ocurriendo ahora mismo en Francia), las fotos de Peter Voigt de de enormes bloques de viviendas de barrios deshumanizados de Shanghai y Tokio, que podrían ser los de cualquier barrio del mundo, con sus balcones repetidos y su silueta gris.
Después en el vestíbulo se proyectó un audiovisual de José Morraja y Marisol Simó que criticaba al parecer la mitificada figura de los DJs y que se resolvió con mucho ruido y pocas nueces.

(Foto: fragmento de "In_Corpórea" de Meost).

4.11.05

RUINAS (ESQUISSE VI, PRIMERA PARTE)


El pasado día 30 de octubre se clausuró en La Pedrera una exposición que se titulaba El esplendor de la ruina, y que recorría con brevedad la historia de las ruinas en la pintura. En el Renacimiento, las ruinas eran una representación de la caducidad de las cosas del mundo, y en concreto la decadencia de lo pagano y triunfo del cristianismo. En el Barroco pasaron a ser emblema de la muerte y "paraíso perdido", moda pictórica con sus tópicos. En la Ilustración nace una nueva visión, la arqueológica: las ruinas se estudian de un modo científico, y al mismo tiempo se usan para meditar sobre la fugacidad del tiempo y la historia. Y por fin en el Romanticismo se exalta la ruina como entorno onírico y estético. Vimos algunos bellos ejemplos de cada época, desde Posthumus y Panini, pasando por Patel y Nomé y algunos caprichos de Piranesi hasta Bellotto, Hubert Robert y una pequeña y exquisita obra de Caspar David Friedrich.
La exposición se completaba con un vídeo realizado para la ocasión, Soñando nuestra ruina de Andrés Hispano y Luis Cerveró, que no hablaba de la ruina como vestigio arqueológico, como poso de otras culturas y otras civilizaciones, ni tampoco desde un punto de vista estético o filosófico, sino como el resultado de la destrucción y la ceguera humana, y sobre todo de la guerra.
Esta visión era más moderna, cinematográfica, y hacía un recorrido cronológico con énfasis en algunos puntos concretos (Germania anno zero, por ej).
La exposición me sugirió dos recorridos personales. Al primero (sugerido por la parte pictórica de la exposición) lo he llamado "Ruinas en el mar"; al segundo, inspirado en el vídeo, "Horrores de la guerra".



1. RUINAS EN EL MAR

1987. En el Breviario Mediterráneo, de Predrag Matvejevic (traducción de Milivoj Telecán):
"Durante los días en que el mar está particularmente diáfano y su profundidad se hace visible, aparecen aquí y allá contornos de objetos, despojos y construcciones insólitos: es posible hacerse la ilusión de haber descubierto en el fondo una galera con un cargamento precioso, un palacio de otros tiempos, los restos de una ciudad antigua. (Las formas ondulantes recuerdan la memoria humana, los cascos destrozados hacen pensar en la historia, las ruinas, el destino.) El Mediterráneo es un coleccionista apasionado".


1988. Paisaje en la niebla, de Theo Angelopoulos, es una película cargada de simbolismos que narra el viaje iniciático de dos hermanos en busca de su identidad. En una de las escenas, una grúa gigantesca extrae del mar los restos truncados de una enorme estatua: una mano, una cabeza, fragmentos de un pasado glorioso y restos de un mundo que ya ha dejado de tener sentido, porque la Grecia que vemos en esta película no es luminosa y sabia, sino un mundo duro y hostil, un paisaje perpetuamente velado por la niebla donde las esperanzas tienen pocas posibilidades de encarnar.

1989. En la sala de exposiciones de la Fundación La Caixa, vi Exposure Time de Eugènia Balcells. Era una especie de diorama que simulaba el fondo del mar, con sonidos y filmaciones que lo acompañaban para reforzar el efecto. Los restos de elementos arquitectónicos que incluía procedían de los derribos de casas, chiringuitos y edificios que tuvieron lugar para crear la "Barcelona Olímpica", los años previos al 92. El agua del mar había suavizado sus contornos y convertido cualquier ménsula de balcón, ladrillo o baldosa hidráulica en restos arqueológicos, fantasmales capiteles, estilizadas ruinas antiguas...
Me impresionó ver por primera vez la trama de la construcción y destrucción de mi ciudad, algo que había ocurrido miles de veces a lo largo de miles de años, pero siempre de forma oculta y vergonzante, a golpe de piqueta y capazo o de taladro neumático y volquete, pero en todo caso un trabajo de termitas, y que por primera vez y debido a la megalomanía de los políticos y próceres modernos y la mirada crítica de la artista se me hacía evidente, como cuando examinas una tela al trasluz.
La seducción del mar y su misterioso yacimiento arqueológico, falsamente antiguo, convertía el desecho en belleza, asimilando los escombros ("runa") a la ruina ("ruïna").