27.6.08

VERBENA

17.6.08

FUERZA, DELICADEZA


La delicadeza, en el arte, no es necesariamente lo opuesto de la fuerza. Una acuarela sobre seda puede tener un efecto más poderoso en el espectador que una figura de bronce de tres metros de alto. La mayor parte de los dibujos de Watteau son tan delicados, tan vacilantes que casi parecen hechos en secreto, como si hubiese estado dibujando una mariposa que se acabase de posar en una hoja ante él y temiese que el movimiento o el ruido del carboncillo en el papel pudieran espantarla. Sin embargo, al mismo tiempo, son dibujos que revelan un enorme poder de observación y de sentimiento.


John Berger, "Drawings by Watteau", 1964, en Selected Essays (la traducción es mía).
Antoine Watteau, Jeune fille.

12.6.08

PRIMAVERA ABSURDA


Tengo a mi pobre ganso algo abandonado. Demasiado trabajo, una difícil adaptación a esta primavera absurda y pasada por agua... Estoy leyendo las entrevistas a autores del libro de The Paris Review traducido por Raquel, y William Faulkner dice: "Si el escritor se concentra en lo que tiene que interesarse, que es la verdad y el corazón humano, no le quedará mucho tiempo para nada más..." Últimamente cada vez suscribo más esa forma de entender la literatura y menos la de los escritores (muchos) que se interesan sólo por la tensión dramática, por jugar con el lenguaje, por las descripciones minuciosas o por la acción, y que desprecian todo lo demás como “sentimentalismo”. Sé que quizá esto vaya contracorriente, pero qué le vamos a hacer. Estoy un poco harta de esa escritura eficaz y funcional, puramente utilitaria. Y también de la pirotecnia sin alma, por muy intelectual que resulte. Quiero leer cosas verdaderas. ¿Es tan difícil?